Linkin Park está de vuelta ¿Nostalgia o una frescura necesaria?
Al escribir el título de esta nota me sentí un poco como J Jonah Jameson de Spider-Man cuando dice: “Hombre Araña ¿Héroe o Amenaza?” y es que no puedo evitar sentir que este regreso me cause todo tipo de emociones que me hagan cuestionarlo todo, pero también, sentir esta alegría y ese nervio de la posibilidad de poder verlos de nuevo en vivo.
Ahora ¿por qué hablo de nostalgia de una frescura necesaria? Me explico:
Es bien sabido que el Nostalgia Marketing es de los ganchos más rápidos y comunes en estos días para atrapar la atención de los millennials (grupo generacional al que pertenezco) y que aplica en todo aspecto: ropa, retro-tecnología, conciertos, etc.
Entonces que una de las principales bandas del Nü Metal de principios de los dosmiles esté de vuelta tras años de ausencia (salvo compilados y remixes), causados en gran parte por el sensible fallecimiento de Chester Bennington, su vocalista, obvio nos hace cuestionarnos si lo están haciendo por el dinero; el dinero, tal vez no de los discos, pero sí el de los streamings, de los conciertos, de la mercancía, de los collabs, etc.
¿Nos gusta esta nostalgia?
A título personal, sí ¡me encanta! El ver la transmisión en vivo que hicieron, en donde su nueva vocalista, Emily Armstrong fue presentada, fue algo muy emocionante, no solo por escucharla a ella y a esta voz que suena fuerte y desgarradora, sino también por escuchar de nuevo esos temas que muchos amamos de Linkin Park como “Crawling” y “Somewhere I Belong” entre otros.
Si esta nostalgia nos trae grandes recuerdos a los que crecimos escuchando a LP -en mi caso- desde la secundaria, y servirá para darnos un instante de emoción como sucedió hace un par de años con My Chemical Romance tocando en el Corona Capital, está perfecto, está bien, pero ahora, podríamos apuntar hacia el segundo tema de esta nota:
UNA FRESCURA NECESARIA
¿Por qué hablar de esto?
Bueno, por la misma razón que menciona Anton Ego en Ratatouille (ando muy cinéfilo en esta nota si ya se dieron cuenta):
“Perspectiva, quiero una fresca, clara y deliciosa perspectiva”
Si no lo sabían (lo menciono aquí) cada tanto hago un playlist topado a 300 canciones en donde voy escuchando todo lo nuevo que sale y también aquellos discos clásicos o anteriores que no haya escuchando en su totalidad de cualquier artista del mundo; banda, jazz, rock, metal, pop, clásica, soundtracks, corridos, reggaeton, etc. y la verdad es que mucha de la música nueva me cuesta trabajo, no que no haya música nueva que no me guste, pero por ejemplo, tengo un tema con la fábrica coreana musical: el k-pop; porque uno y lo diré tal cual: NO LE ENTIENDO NADA; dos, al tener beats tan fabricados y voces tan similares, no me transmite ninguna emoción (sí, hay dos o tres temas que me gustan, pero solo porque son pegajosos, no porque sean buenos realmente).
Por el contrario, aprecio y defiendo el reggaeton porque después de muchos años los artistas han sabido crear nuevas cosas y recrear, retomando elementos de otros géneros y/o canciones; desde lo que hacen Benito y Feid remezclando temas del hoy llamado “Reggaeton Viejito” hasta lo que hace Gabriel Garzón-Montano (que realmente su trabajo me cuesta llamarlo reggaeton, pero vaya usted y juzgue):
En los últimos años el pop se apoderado de los charts y es que claro, hay discos y exponentes muy buenos y ni hablar del dominio de Taylor Swift, Sabrina Carpenter, Chappelle Roan y Olivia Rodrigo; este cuarteto es de verdad un fenómeno de composición, voz y producción, pero, el rock se ha quedado un poco muy atrás.
Lejos quedaron ese momento que tuvieron The Killers, The Strokes, Green Day y otros de ese momento; sus nuevos discos, aunque muy buenos, no han logrado traspasar la barrera generacional que por cierto, es peculiar, pues aunque están volteando a ver a artistas como The Warning o Kim Dracula, aún no hay (creo) algún artista y/o agrupación que este creando un momentum musical rock como lo hicieron en sus momentos: Linkin Park, Limp Bizkit, Deftones, Mudvyane; para luego evolucionar (si puedo llamarlo así) a lo que nos trajo MySpace y con ello The Strokes, The Killers, Arctic Monkeys, etc.
Me gustaría ver si este nuevo Linkin Park nos trae una nueva, “fresca, clara y deliciosa perspectiva” en que el rock recupere un poco de ese terreno perdido o si al contrario, su regreso a los escenarios refuerza este sentir de que el rock (con todos sus subgéneros) volvió a ser meramente de nicho.
Ojo, no que haya algo malo en que el rock se mucho o poco popular, sino que creo que veremos dos puntos de partida: el que genere la gente de mi edad (treinta y tantos) al ver resurgir a una de sus bandas favoritas con dos nuevos integrantes y también; el punto de partida de las nuevas generaciones, quienes verán a una banda (al menos para ellos) completamente nueva, con una mujer al frente, una mujer a la que ya se le empezó a criticar, comparar y cuestionar por todo; desde haber sido amiga de Danny Masterson (actor condenado a prisión por diversos cargos incluyendo violencia y abuso) o el hecho de sonar (o no) como Chester o “su cambio de look” de pasar a su banda a anterior (Dead Sara) a LP o simplemente, por el lugar que está tomando y los zapatos que muchos quieren que llene, en lugar de dejarla ser.
Déjemos que la música suene y que sean el ritmo que nos guíe y de mientras y sobre todo, disfrutemos la música.
